Las playas y los espacios públicos del Caribe mexicano fueron reabiertos a los visitantes tras reducirse de alta a media la situación de riesgo de contagio del coronavirus en el estado de Quintana Roo.
Su apertura ahora bajo estrictos protocolos sanitarios era una de las acciones más esperadas por la población y turistas porque hasta ahora solo podían entrar a las playas los que estaban hospedados en hoteles.
Las personas interesadas en disfrutar las playas en esta nueva normalidad deberán mantener una distancia de entre 2.5 y 5 metro con otros grupos de familias, usar cubrebocas en las zonas de entrada y salida, baños y en áreas de transición, pasar un filtro sanitario y tendrán prohibido introducir bebidas alcohólicas.