Un estudio pionero para Panamá, elaborado por el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) señala que integrar la Agenda de Transición Energética en los planes de recuperación post-COVID-19 es una inversión que traerá beneficios significativos para la economía, con la generación de 15 mil nuevos empleos en los próximos 3 años.
Durante la presentación del Informe el Secretario Nacional de Energía, Jorge Rivera Staff, aseguró “que el informe realizado para Panamá es una herramienta para la toma de decisiones informadas, en el cumplimiento con los objetivos de la Agenda de Transición Energética… que permitirán el cumplimiento de los compromisos que adquirió con la población el Presidente Laurentino Cortizo Cohen”.
Rivera Staff, añadió que dentro de las estrategias específicas para esta reactivación económica se encuentran acciones vinculadas a la modernización del marco regulatorio, eficiencia energética, la innovación, la movilidad eléctrica, sistemas de generación distribuida renovables”.
Con base en datos concretos y los resultados del Modelo Económico Verde, La transición energética como motor de la recuperación económica ante la COVID-19 en Panamá ilustra cómo una transición energética centrada en las energías renovables y la electrificación hará crecer el PIB panameño y el empleo a corto plazo, con incrementos sustanciales en el futuro.
Cabe destacar que el Informe entregado por el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), analizó tres escenarios para la recuperación verde postCovid-19. Sin embargo, la Secretaria Nacional de Energía considera realizable, el escenario que proyecta la Agenda de Transición Energética, tomando en consideración las condiciones presupuestarias en que se encuentra la economía mundial y la panameña producto de la pandemia que afrontamos.
Al respecto, el reconocido empresario panameño Eduardo de Guardia expresó que se “necesita que todos los agentes del mercado trabajemos juntos para lograr los objetivos que sustenta el informe”, quien calificó el documento como una “buena base para lograr la transición energética… que no tiene vuelta atrás”.
El estudio encuentra que el incremento en los niveles de ambición climática para la recuperación de la COVID-19 es directamente proporcional a los beneficios que pueden obtenerse económicamente. Por ejemplo, en escenario de la Agenda de Transición Energética, los logros están relacionados a la inversión del 39% destinados al paquete de recuperación económica que ha facilitado el Gobierno Nacional.
Al respeto, la Viceministra de Economía y Finanzas Enelda Medrano, aseguró que “ya se está apoyando la Agenda de Transición”, al citar como ejemplo el inicio de los trabajos de la ampliación del Metro, principal fuente de la contaminación ambiental. Igualmente, señaló avances en materia de energía eólica, la visión de lograr un sólido Hub Energético para el mundo, y recientes decisiones a nivel del Ejecutivo, alineadas con los compromisos climáticos en materia de generación eléctrica.
“Este estudio es oportuno ya que es clave que los planes de recuperación pos-COVID-19 en América Latina y el Caribe incluyan medidas para promover tecnologías e infraestructura de cero emisiones, que son cruciales para lograr los objetivos del Acuerdo de París, así como de la Agenda 2030, y generar prosperidad a largo plazo”, dijo Leo Heileman, director regional del PNUMA en América Latina y el Caribe.
“La transición del sector energético requerirá importantes inversiones, al igual que la recuperación de la COVID-19, de modo que es fundamental unificar ambos esfuerzos. El GEM no solamente muestra los escenarios potenciales, sino también los beneficios y, aún más importante, provee una serie de pasos que necesitamos seguir”, destacó Ligia Castro de Doens, asesora en el Ministerio de Ambiente de Panamá.
Tras reconocer que el país es un modelo para América Latina y el Caribe en términos de transición energética, Ana Gordon Vergara, encargada de Negocios de la Unión Europea en Panamá, señaló que para alcanzar la meta de reducción de 1,5 ºC del Acuerdo de París y disminuir las enormes brechas, hacen falta datos, modelos y planes robustos que sienten las bases de las trayectorias de cero emisiones.
Destacó también la importancia de las alianzas sólidas y la cooperación entre países y regiones para aumentar los esfuerzos colectivos rumbo a una recuperación global, verde y resiliente de la COVID-19 y hacia un planeta con cero emisiones de carbono.
El estudio toma como base el informe Carbono Cero: la oportunidad, el costo y los beneficios de la descarbonización combinada de los sectores de energía y transporte, publicado por el PNUMA en 2019, que presenta la viabilidad tanto técnica como económica de una transición que ahora gana aún más importancia.
“Con este trabajo se confirma que las propuestas incluidas en la Agenda de Transición Energética tienen todo el potencial para fungir como herramientas para la reactivación económica sostenible dentro de la visión de ‘reconstruir mejor’… y aseguró que este informe es una guía y será sometido a una revisión permanente para alcanzar el desarrollo del sector”, concluyó Jorge Rivera Staff, secretario de Energía de Panamá.
El informe fue realizado bajo el liderazgo de la Secretaría Nacional de Energía y el Ministerio de Ambiente de Panamá, con el apoyo del PNUMA y la Unión Europea.