El Hospital Aquilino Tejeira de Coclé enfrenta una situación crítica sanitaria debido a una serie de fallas que afectan su capacidad de atención. La institución informó que, por el momento, no cuenta con suministro de agua potable, luego de que la planta potabilizadora de Penonomé sufriera una interrupción por fallas técnicas. 

A esto se suma una falla eléctrica causada por alteraciones en el voltaje en toda la zona, que ha impedido el correcto funcionamiento de los pozos de agua de emergencia.

Como resultado, el hospital ha tenido que suspender cirugías electivas y los servicios de consulta externa durante el día. Además, el servicio de urgencias solo puede atender casos extremos, debido a la limitación en recursos críticos. 

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La institución estima que, si se logra restablecer el suministro de agua y energía eléctrica, la normalidad en los servicios se retomará a partir del miércoles 17 de septiembre.

Para garantizar la atención a quienes lo necesitan, las autoridades del hospital han coordinado con otros centros de salud de la región para trasladar a pacientes que requieran intervenciones urgentes o atención especializada que no puede ofrecer en estas circunstancias. 

La comunidad coclesana ha sido advertida sobre la situación y se ha pedido comprensión ante las dificultades temporales que enfrentan. La prioridad del hospital sigue siendo la salud y seguridad de sus pacientes, mientras trabajan en conjunto con las autoridades para solucionar la crisis lo antes posible.