El estado estadounidense de Pensilvania autorizó a Uber a retomar las pruebas de vehículos de conducción autónoma en la vía pública, indicó la compañía el martes a la AFP.

El grupo estadounidense tuvo que dejar los ensayos después de que en marzo un vehículo que circulaba en modo autónomo atropellara mortarlmente a un peatón.

Uber recibió una carta oficial de autorización para retomar los test en Pitsburg, donde está la sede de ATG, la división de la compañía especializada en la conducción autónoma, indicó la empresa, confirmando así una información avanzada por la revista especializada The Verge.

El grupo precisó que aún no ha comenzado a realizar pruebas.

Uber anunció en julio que volvería a hacer ensayos de vehículos autónomos en la vía pública, aunque con un conductor al volante. 

Aunque el vehículo sea conducido manualmente, estas pruebas son útiles para probar los equipos y mejorar los sistemas.

Pero Uber, que prepara su entrada en bolsa próximamente, necesita desesperadamente acumular horas de test en modo autónomo, ya que es la única manear de hacer que el sistema sea fiable a largo plazo.

La conducción autónoma es vista como el Santo Grial de la industria automotora. En eso trabajan constructores, proveedores de equipos y empresas tecnológicas.

Particularmente están interesados en esta tecnología plataformas como Uber, cuyos costos principales son la remuneración de los conductores.