España y la Unión Europea protegerán sus inversiones en Cuba en momentos en que están bajo amenaza de demanda en Estados Unidos por operar con bienes confiscados por la revolución de 1959, así lo afirmó el miércoles en La Habana el canciller español Josep Borrell.
El gobierno de Donald Trump arrecia el bloqueo que Estados Unidos aplica a Cuba desde 1962.
Entre las medidas de presión, los estadounidenses activaron el artículo tercero de la ley Helms-Burton, que data de 1996 y permite demandar en tribunales estadounidenses a compañías que hagan uso de bienes nacionalizados por la revolución de Fidel Castro.
Borrell admitió que estas medidas ahuyentan la inversión.
España es el tercer socio comercial de Cuba después de China y Venezuela, con un comercio de 1.390 millones de dólares en 2018.
La presencia española es especialmente sensible en el sector turístico, con 80 contratos de administración hotelera.
Borrell además confirmó que el rey de España, Felipe VI visitará La Habana en noviembre en ocasión del 500 aniversario de la capital cubana.