Con una mezcla de alegría, emoción y gratitud, Edmundo Grajales, de 75 años, tocó la simbólica campana de la vida en el Centro de Cancerología de la Ciudad de la Salud, marcando el fin de una larga y valiente batalla contra el cáncer.
Acompañado de su esposa, su mayor apoyo durante estos años, y del personal médico que lo atendió, Edmundo celebró la culminación de 35 sesiones de radioterapia que le devolvieron la esperanza y la salud.
“Me siento perfectamente. No me duele nada”, expresó con una sonrisa al recordar el camino recorrido.
Su diagnóstico de cáncer de pelvis, recibido hace seis años, lo llevó inicialmente al Instituto Oncológico Nacional (ION), donde debió suspender su tratamiento de quimioterapia debido a las restricciones impuestas por la pandemia de COVID-19. A pesar de los contratiempos, nunca perdió la fe ni las ganas de luchar.
Cuando su condición se agravó, fue referido al recién inaugurado Centro de Cancerología, donde recibió atención continua durante un mes y medio.
“El tratamiento ha sido magnífico. Estoy agradecido y creo que voy a llegar a los 80 años de vida”, afirmó entre risas, emocionado tras tocar la campana que simboliza el fin del tratamiento y el inicio de una nueva etapa.
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Este logro personal refleja el impacto positivo de la estrategia del Gobierno Nacional de integrar los servicios del ION y el Centro de Cancerología, lo que ha permitido reducir tiempos de espera y mejorar la calidad de atención para los pacientes oncológicos.
La apertura oficial del Centro de Cancerología, realizada el pasado 4 de abril por el presidente José Raúl Mulino, representa un avance significativo en la lucha contra el cáncer en Panamá, brindando nuevas oportunidades de tratamiento y esperanza a cientos de pacientes.
