Inspectores de la Dirección Ejecutiva de Cuarentena Agropecuaria del Ministerio de Desarrollo Agropecuario (MIDA) intensificaron en agosto sus controles en el área portuaria de Balboa, en un esfuerzo por fortalecer la protección del país contra la entrada en Panamá de plagas y enfermedades que puedan afectar la sanidad agropecuaria nacional.
La campaña, que combina medidas técnicas y operativas, busca garantizar que las importaciones y exportaciones se realicen bajo estrictos protocolos de seguridad sanitaria.
Uno de los aspectos destacados de estas acciones fue la colocación de más de 7,300 sellos de seguridad en contenedores de trasiego en la garita principal del puerto, una medida que permite mejorar la trazabilidad y el control de mercancías y otros artículos reglamentados que ingresan al país.
Esta estrategia no solo ayuda a prevenir el ingreso de plagas, sino que también facilita el seguimiento y la inspección en caso de irregularidades.
Asimismo, se llevaron a cabo cerca de 23,000 tratamientos cuarentenarios en los arcos de control dentro del puerto, procedimientos preventivos destinados a eliminar posibles vectores de plagas antes de que puedan dispersarse en el territorio nacional.
Estas acciones forman parte de un programa integral que combina controles físicos, tratamientos y muestreos, en línea con las mejores prácticas internacionales en bioseguridad.
En una operación adicional, inspectores realizaron la toma de muestras en un barco carguero de arroz en cáscara, en un esfuerzo por detectar posibles plagas en productos vegetales en tránsito.
En total, se procesaron 620 muestras, todas relacionadas con material vegetal, mediante análisis entomológicos en los módulos de diagnóstico.
Estos procedimientos permiten detectar oportunamente la presencia de insectos y otras plagas reglamentadas, facilitando decisiones rápidas para mitigar riesgos.
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El trabajo de los inspectores no se limita a los procedimientos en tierra. También se llevaron a cabo entrevistas con marinos y propietarios de yates que ingresan al país, con la finalidad de informar y prevenir sobre los riesgos cuarentenarios asociados a productos o materiales reglamentados que puedan transportarse en embarcaciones.
Este enfoque proactivo busca crear conciencia entre los actores del transporte marítimo y reducir la probabilidad de introducir plagas inadvertidamente.
Estas acciones reflejan el compromiso del MIDA de mantener una frontera sanitaria sólida y efectiva. La labor de la Cuarentena Agropecuaria en Balboa se presenta como la primera línea de defensa contra amenazas fitosanitarias, protegiendo la sanidad del sector agropecuario y, en última instancia, la economía del país.
La coordinación entre diferentes unidades y la aplicación rigurosa de controles técnicos son esenciales para evitar que plagas y enfermedades ingresen y se establezcan en Panamá, preservando así la biodiversidad y la seguridad alimentaria nacional.
