La Organización Mundial de la Salud (OMS), decidió la tarde de ayer no declarar emergencia sanitaria internacional por el nuevo virus similar al SRAG (o SARS, por sus siglas en inglés) originado en la zona central de China.
La OMS decidió que el coronavirus no constituye una crisis de salud pública de internacional, y señaló en Ginebra, Suiza, que continúa el monitoreo del virus, se considera que el virus es una emergencia local.
Haber declarado emergencia internacional indicaba comenzar a dar respuesta a los gobiernos y restricción a los viajes a y desde China para detener el avance de la infección.
“Ahora no es el momento”, dijo Didier Houssin, presidente del comité de emergencia de la OMS, es “demasiado pronto para considerar que este evento es una emergencia de salud pública de interés internacional”.
Pese a lo anterior, el panel de especialistas señaló que está listo para reunirse nuevamente en aproximadamente 10 días o antes si es necesario.
El virus, apareció el mes pasado, y parece poner en riesgo principalmente a personas cuya salud ya está comprometida, entre sus síntomas se cuentan fiebre, tos, opresión en el pecho y dificultad para respirar.
Tanto el virus de Wuhan, ciudad donde se originó el virus, también conocido como 2019-nCoV, como el SRAG pertenecen a la familia de los coronavirus, llamados así por su forma de corona.
El miércoles, autoridades de salud dijeron que todavía no habían visto pruebas de “súper propagadores”, es decir, personas infectadas que transmiten la enfermedad rápidamente a muchas otras personas, pero que no podían descartar que surgieran algunas.
Los súper propagadores desempeñaron un papel clave en la pandemia del SRAG hace 17 años, que dejó casi 800 fallecidos e impactó las economías de toda la región.