París, (EFE).-

 

La reapertura en Francia de los cines, teatros, museos, salas de conciertos y otros equipamientos culturales dependerá de los datos epidémicos una vez que pasen las vacaciones de Navidad, lo que impide fijar por ahora una fecha.

Este es el mensaje de la ministra de Cultura, Roselyne Bachelot, que en una entrevista este viernes al canal BFMTV justificó por razones sanitarias la ducha fría para el sector que supone el mantenimiento del cierre, cuando se esperaba que pudiera levantarse a partir del 15 de diciembre.

En la línea de los argumentos dados el jueves por el primer ministro en sus anuncios sobre las restricciones durante las navidades, Bachelot dijo que “lo terrible para el mundo de la cultura sería reabrir el día 15 (…) para eventualmente volver a cerrar el 2, el 3 o el 7 de enero. Se asesinaría la cultura”.

La ministra admitió que la situación epidémica es menos favorable de lo que se esperaba, con 14.000-15.000 contagios diarios en los últimos días, frente al objetivo de 5.000 que se había fijado para poner fin al confinamiento domiciliario en vigor en Francia desde finales de octubre.

Hizo hincapié en que aunque “las salas de espectáculos no son lugares peligrosos” para la transmisión de la covid por los protocolos que se han establecido, “el problema es la mezcla de poblaciones” que generan.

Bachelot dijo que no puede avanzar una fecha para la reapertura porque “habrá que constatar la situación sanitaria” que dejarán las vacaciones de Navidad, algo que se espera que pueda hacerse a partir del 7 de enero.

También recordó que las ayudas a la cultura para hacer frente a la crisis del coronavirus son de 7.000 millones de euros, entre subvenciones a las empresas y subsidios a los trabajadores e independientes, y que ha pedido que el Gobierno dé su visto bueno a 35 millones para ayudas específicas para el periodo de fin de año para cines, teatros o salas de espectáculos.

 

Fuente: EFE