Cuba ofreció este martes posibilidades de regreso y trabajo a sus médicos que no retornaron de Brasil a fines del pasado año, algunos de los cuales perdieron su empleo después que el gobierno de Jair Bolsonaro eliminó el programa Más Médicos.
“El Ministerio de Salud Pública ratifica que, como lo ha hecho para los que han estado en otros países, está dispuesto a recibirlos en la Patria y ofrecerles empleo en el sistema nacional de salud cubano”, señala una declaración de esa entidad estatal.
Esta decisión, señaló, se toma “poniendo por encima de todo la dignidad humana, los derechos y la seguridad de nuestros médicos, incluidos aquellos que decidieron no regresar al concluir su misión” en Brasil.
Un contingente de más de 8.000 médicos cubanos trabajó en Brasil por más de cinco años en el marco del programa Más Médicos, pero debido a condiciones exigidas por Bolsonaro y no aceptadas por la isla, el gobierno cubano decidió concluir el acuerdo, bajo el amparo de la Organización Panamericana de la Salud.
El ministerio informó que la embajada y los consulados cubanos en Brasil “están listos para apoyar su regreso, proporcionándoles la documentación requerida y asistiéndoles en lo que esté a su alcance”.
Según el presidente Miguel Díaz-Canel, regresaron a la isla 7.635 médicos, el 90% de los que formaban parte de este dispositivo destinado principalmente a la atención de los sectores menos favorecidos, en plazas que no habían sido ocupadas por profesionales brasileños. Otros 836 optaron por permanecer en el país sudamericano por diversas razones.
Pero recientemente el programa fue definitivamente cancelado y las autoridades brasileñas “no (…) han cumplido los ofrecimientos de empleo a los médicos cubanos que eligieron no regresar a Cuba al término de su misión, así como a algunos otros que formaron familias con ciudadanos brasileños”, explicó el comunicado.
“Como era de esperar, los adversarios históricos de la Revolución y los enemigos de su sistema de Salud Pública, se han aprovechado de esta situación y cabildean dentro de Estados Unidos para resucitar los viejos programas de robo de cerebros que, como el Parole para profesionales de la salud cubanos, habían recibido tanto repudio internacional, por lo que fueron cancelados”, añadió.
Al cierre de 2018, más de 34.000 médicos y paramédicos cubanos trabajaban en 66 países. En los casos de los países más pobres, como Haití, esa asistencia es gratuita, pero en la mayoría está basada en acuerdos oficiales de prestación remunerada al gobierno de la isla.
Los servicios profesionales en el exterior, fundamentalmente médicos, constituyen la más importante fuente de captación financiera de la economía cubana, con alrededor de 10.000 millones de dólares anuales.