La Guardia Civil española anunció este martes la detención de 66 personas en una zona del sur del país de alta actividad del narcotráfico, en el marco de una operación contra las bandas que actúan de manera temeraria.

Según un comunicado del Ministerio del Interior, la policía capturó a los sospechosos en la región de Andalucía, que incluye la provincia de Cádiz, por donde ingresa el 40% de la droga a España.

Se trata del último golpe policial de los últimos meses dentro de una amplia operación contra el narcotráfico en la zona, donde el gobierno envió refuerzos policiales el año pasado prometiendo que la región no sería “dominada por los narcotraficantes”.

A los últimos detenidos se les imputan “los delitos de organización criminal dedicada al tráfico de drogas, robo de vehículos y blanqueo de capitales”, especificó el comunicado.

La Guardia Civil confiscó siete toneladas de hachís y cuatro embarcaciones de alta velocidad, así como desmanteló dos embarcaderos “utilizados por diversas organizaciones para botar embarcaciones semirrígidas a alta mar con las que llevaban a cabo los alijos de hachís”.

Andalucía, una región con alta tasa de desempleo y cercana a Marruecos, de donde proviene el hachís, ha sido escenario de la temeraria actividad de los narcotraficantes en los últimos años.

Las mafias han hecho desembarcos en playas a plena luz del día, se han enfrentado a la policía e incluso protagonizaron un asalto a un hospital en la localidad de La Línea de la Concepción para rescatar a uno de los suyos.

Según fuentes de los sindicatos policiales, las organizaciones dedicadas al narcotráfico en la zona pagan a “legiones de jóvenes” para que colaboren con ellos.