El mánager de los Tigres de Chinandega, el panameño Lenin Picota, insinuó anoche después que su equipo se impusiera (8-2) al Bóer en el primer partido de la serie semifinal , que el jonrón de tres carreras de Jamar Walton fue un castigo para los Indios por haber fraguado una noche negra contra el estadounidense el jueves, cuando este se prestaba a definir el título de bateo contra Javier Robles.
“A Walton no le picharon en las circunstancias que todos conocemos, bloquearon en todo momento que él pudiera batear con libertad y ahora el beisbol ha regañado al Bóer, nadie puede irrespetar el juego y no tener consecuencias, gracias a Dios todo nos salió bien”, dijo Picota en entrevista con el periodista Ramón McClean, de Radio 800.
“Lo necesitábamos”
Walton castigó al picheo del Bóer en el séptimo episodio, para sellar una victoria de 8-2 en el Estadio Efraín Tijerino, y provocó en los locales una reacción de júbilo por el antecedente inmediato entre el pelotero y la tropa capitalina.
“Ese era el batazo que necesitábamos. Walton apareció en el momento correcto para asegurarnos el triunfo. Como Tigres, pudimos batear al relevo del Bóer y son esas pequeñas grietas que uno debe aprovechar”, apuntó Picota.
Fuente: La Prensa de Nicaragua




