Brasil registró en el primer semestre de 2020 un déficit de 9,734 millones de dólares en sus transacciones con el exterior, lo que supone una reducción de un 53.6% frente al resultado negativo de 21,000 millones del mismo periodo del año pasado, informó este martes el Banco Central.

El resultado de las transacciones corrientes es uno de los principales indicadores del sector externo del país y está formado por la balanza comercial, la de servicios y los intereses, ingresos y dividendos que Brasil envía y recibe del exterior.

De acuerdo con el Banco Central, la mejora en el resultado de las cuentas externas en el primer semestre en plena pandemia de coronavirus obedece al saldo positivo registrado en la balanza comercial, impulsada sobre todo por el aumento de las ventas de productos agropecuarios y la reducción de las importaciones.