Entre los principales resultados la ministra Ryda Varela de Chinchilla destacó en su Informe de Gestión 2014-2919, el crecimiento económico sostenible con baja inflación y el impacto positivo que se ha generado en la economía del país, permeando a todas las capas sociales y sectores en general y la importancia de que Panamá sigue manteniendo su condición de grado de inversión con perspectiva estable, lo que representa una reducción importante en el costo de financiamiento de la deuda tanto pública, como de las empresas y de los ciudadanos en general.
Tambien se refirió a otro de los logros importantes consiste el ordenamiento de las finanzas públicas con disciplina fiscal y cumpliendo la Ley de Responsabilidad Social Fiscal (LRSF), la reducción de la pobreza y desigualdad, los avances en materia de transparencia fiscal y financiera que le han permitido el país salir de las listas negras, así como también la modernización del Estado, generando ahorros y eficiencias en la gestión pública, y de la Dirección General de Ingresos, que ha logrado un aumento importante en las recaudaciones sin necesidad de aumentar impuestos.
Panamá se destaca como uno de los países de mayor crecimiento en América Latina, ha encabezado el crecimiento de la región en los últimos años, con un Índice de Desarrollo Inclusivo de 4,54 sobre 7 y experimentó, además, el mayor crecimiento medio dentro de esta región, un 4,8% entre 2012 y 2016, por lo que se proyecta con un crecimiento económico positivo para el 2019.
Al tercer trimestre de 2018, el Producto Interno Bruto (PIB) creció 3.6%.
Entre 2015 y 2017, esta administración logró contener y reducir la inflación a menos del 1% anual, pasando del 4.0% en 2013 a 2.6% en 2014, hasta alcanzar 0.9% en 2017, lo que refleja una reducción de 3.1% en estos periodos.
Además, se ha realizado un impacto positivo en la economía nacional destinando mayores inversiones al interior de la república, lo que representa unos B/. 6,230.9 millones (28.4% del total invertido) y constituye cerca de 68% más inversión en el interior del país que la administración anterior.
En este período se logró hacer Justicia Social con aumentos salariales a jubilados y pensionados en el 2015 y se devolvió, después de 40 años, la segunda partida del XIII Mes que les fueron retenidas entre 1972 y 1983, mediante el Certificado de Pago Negociable de la Segunda Partida del Décimo Tercer Mes (CEPADEM), a unos 600 mil beneficiarios.
Con la aprobación de la Ley 51 del 10 de octubre de 2018, se modificó la Ley de Responsabilidad Social Fiscal (LRSF) y la que creó el Fondo de Ahorro (FAP), lo que permite una nueva regla fiscal que elimina el ajuste y mantiene objetivos de déficit consistentes con el desempeño fiscal bajo el marco fiscal anterior.
Los Ingresos Tributarios muestran excelentes resultados y con una marcada tendencia positiva. En 2016, la DGI logró recaudar cerca de 10% adicional del año anterior gracias al reforzamiento de las auditorías y jurisdicción coactiva, la fiscalización masiva, la gestión de cobros telefónica, entre otros.