Los Ángeles, Estados Unidos
Gran parte de California se encuentra en alerta máxima por importantes incendios, incluidas zonas alrededor de Los Ángeles donde decenas de miles de personas fueron evacuadas este viernes.
Un fuego se declaró en un barrio del norte de la metrópoli californiana sobre las 21H00 del jueves (04H00 GMT del viernes), y se extendió rápidamente por unas 1.600 hectáreas durante la noche, alimentado por los vientos cálidos propios de ese estado del oeste de Estados Unidos y la sequedad de los suelos.
Un número indeterminado de viviendas resultaron destruidas o dañadas en esa zona residencial, pero el incendio no dejó ninguna víctima, según los bomberos.
“La gente tiene que irse mientras pueda hacerlo”, afirmó el jefe de la policía de Los Ángeles, Michel Moore, en una rueda de prensa en la que indicó que 200 policías se habían desplegado para garantizar el cumplimiento de las órdenes de evacuación que afectan a por lo menos 30.000 habitantes.
Las autoridades abrieron centros de alojamiento de emergencia para acoger a los evacuados.
Cerca de 100.000 habitantes se han visto afectados por el incendio, según los bomberos de Los Ángeles.
Unos 450 de ellos combaten este viernes esos fuegos, calificados de “gran emergencia” por las autoridades.
Esas condiciones peligrosas durarán al menos hasta el final de este viernes, avisaron los servicios meteorológicos estadounidenses (NWS). Los vientos, que podrían alcanzar hasta más de 100 km/h, ponen en riesgo los árboles y los tendidos eléctricos, precisaron.