Decenas de mineros que sostienen una huelga indefinida desde hace tres días chocaron el jueves en Lima con la policía antimotines que frustró su intento de ingresar violentamente al ministerio de Trabajo peruano para protestar por sus condiciones salariales.
“Los manifestantes de la Federación Nacional de Trabajadores Mineros, que se encontraban fuera del ministerio, trataron de irrumpir de forma violenta poniendo en riesgo la seguridad” del público, indicó un comunicado del ministerio de Trabajo.
Dirigentes de la Federación Minera tenían previsto una reunión tripartita con representantes de la entidad privada Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía (SNMPE) y la ministra de Trabajo, Sylvia Cáceres.
Pero el encuentro se vio frustrado porque no asistieron los representantes de las empresas mineras.
Ello desató la violencia de decenas de mineros, que golpearon puertas y destrozaron ventanas, obligando a la policía a utilizar bombas lacrimógenas para dispersarles.
Tras los incidentes, el ministerio del Interior denunció a 17 mineros detenidos en la secretaría de Trabajo.
“Exigimos que se solucione nuestro pliego de reclamos, entre ellos las mejoras salariales y condiciones de trabajo”, dijo a la AFP Charles Jara, dirigente sindical de la minera Condestable.
“No quieren solucionar nuestro pliego. Un trabajador gana (al mes) un promedio de 1.500 soles” (unos 450 USD) indicó Jara, quien agregó que las condiciones laborales son precarias pues “trabajamos 12 y 14 horas bajo el polvo”.
La explotación minera en el país data de antes de la llegada de los conquistadores españoles en el siglo XVI y todavía es uno de los sectores más dinámicos de la economía nacional. Perú está entre los mayores productores del mundo de oro, plata y cobre
