Un tercer grupo de 179 haitianos dejó Chile este lunes en el marco de un programa de repatriación voluntaria con el que ya se devolvieron a su país otras 352 personas.
Los haitianos, previamente inscritos en un programa oficial de “retorno voluntario”, viajaron en un vuelo especial de la Fuerza Aérea de Chile.
Hasta ahora, de acuerdo al gobierno, se habían inscrito unos 2.000 haitianos para regresar a su país, de unos 165.000 que llegaron a Chile en los últimos cuatro años, atraídos por las oportunidades económicas de uno de los países con mayor ingreso per capita de la región.
La mayoría de aquellos que decidieron regresar no encontró trabajo o tuvo problemas con el idioma o el clima.
“Hay muchos haitianos que viven en Chile y que no se han acostumbrado y han preferido regresar voluntariamente a su país”, dijo el subsecretario del Interior, Rodrigo Ubilla, al despedir este lunes al grupo en el aeropuerto de Santiago.
Para acogerse al programa de retorno, los haitianos debían estar libres de antecedentes penales y comprometerse a no regresar a Chile en los próximos nueve años.
Además del programa de retorno de haitianos, el gobierno de Sebastián Piñera tomó una serie de medidas para ordenar el explosivo proceso de migración al país. Entre ellas, estableció desde abril una visa de turismo para los haitianos, que en la práctica llevó a cero su ingreso al país en los últimos meses.
También, se estableció para los venezolanos –que en Chile son cerca de 180.000- una “visa de responsabilidad democrática” que facilita su inclusión laboral, ya que llegan a Santiago con la cédula de identidad ya emitida.
En su retorno a Santiago, la aeronave de la Fuerza Aérea hará una escala en Caracas para retornar a unos 50 chilenos y argentinos que dejarán Venezuela debido a la crisis política y económica.