Singapur entró este martes en el primero de los siete días de duelo nacional por la muerte de su «padre fundador», Lee Kuan Yew.
Lee, que falleció el lunes a los 91 años, lideró la transformación de Singapur de una pequeña ciudad portuaria a una de las naciones más ricas del mundo.
Desde que se conociera su muerte, la figura de Lee, que fue primer ministro de ese territorio durante 31 años, ha sido ensalzada por diferentes líderes mundiales, como el presidente de EE.UU., Barack Obama, quien lo describió como un «gigante de la historia».




