AFP – Lausana, Suiza

La 83 edición de la Vuelta a Suiza servirá a partir del sábado y hasta el 23 de junio como rampa de lanzamiento al galés Geraint Thomas (Ineos) y a su joven compañero colombiano Egan Bernal a pocas semanas del Tour de Francia, que disputarán sin Chris Froome, gravemente lesionado.

La prueba suiza, que cuenta como siempre con una buena parte de montaña, tendrá una importancia particular en la óptica de la Grande Boucle. Ya que Thomas, vencedor del Tour el año pasado, se verá privado dentro de tres semanas de su compañero Froome, que se rompió el fémur, el codo y algunas costillas el miércoles en un entrenamiento del Dauphiné y estará por tanto ausente en las rutas francesas, donde iba a por una quinta victoria.

Para intentar el doblete en París, Thomas, ya presenté esta temporada en la Vuelta a Romandía, donde terminó en la tercera plaza, ha elegido regresar a Suiza.

El galés estará acompañado del prometedor Egan Bernal, que regresa tras una lesión (fractura de la clavícula), anunciada a principios de mayo por su equipo, una semana antes del inicio del Giro.

Vencedor el año pasado, el australiano Richie Porte no defiende su título, al estar en el Dauphiné.

El portugués Rui Costa, segundo en la Vuelta a Romandía, detrás del esloveno Primoz Roglic, puede aspirar a un histórico cuarto triunfo en la prueba, teniendo en cuenta su forma actual.

Otros aspirantes de talla, el esloveno Simon Spilak (Katusha), doble campeón de la prueba (2015 y 2017), el francés Lilian Calméjane (Direct Energie), que había animado la carrera el año pasado, así como su compatriota del AG2R, Pierre Latour, cómodo cuando la carretera se pone en pendiente.

– Sagan para mejorar su récord –

El triple campeón del mundo eslovaco Peter Sagan (Bora) intentará mejorar su récord de victorias de etapa (16 desde 2011).

A destacar también el regreso a la competición del italiano Fabio Aru (Emirates), operado de la arteria ilíaca a principios de abril y que tuvo que renunciar al Giro.

La prueba comienza el sábado con una contrarreloj individual de 9,5 km en Langnau (centro). La tercera etapa está prometida a los esprinters, las cuarta y quinta son más abiertas.

Los últimos días se anuncian competidos, con una llegada en alto en Flumserberg (1.220 metros) el jueves en la sexta etapa, donde el italiano Marco Pantani se impuso en 1995.

Un día después, la llegada será en la cima del Gothard, tras 217 km (y más de 4.000 metros de desnivel). Tras una segunda contrarreloj individual (19 km) el sábado en Goms (sur), mientras que la victoria final se jugará el domingo en una última etapa alpina, con tres puertos de categoría especial (Grimsel, Furka y Nufenen) sobre 144 km, con llegada de nuevo en Goms, tras un descenso de 25 km.