Unos vetustos silos de granos de Corea del Sur transformados en una gigantesca y colorida obra de arte entraron en el libro Guinness World Records como el mayor mural al aire libre del mundo.

La obra, que representa el paso de un joven a la edad adulta, se halla en el puerto de la ciudad de Incheon, al oeste de Seúl, y tiene una superficie de 23.688 metros cuadrados.

Fue encargada por las autoridades locales para mejorar la imagen de las infraestructuras envejecidas.

Según la agencia surcoreana Yonhap, se inspiraron en el Movimiento Muralista Mexicano, cuyos exponentes realizaron numerosas obras públicas en edificios de su país y Estados Unidos a partir de los años 1920.

Veintidós artistas utilizaron más de 850.000 litros de pintura para contar su historia, que refleja las cuatro estaciones, por un coste de 550 millones de wones (490.000 dólares, 430.000 euros). Les silos parecen ahora tapas de libro.

El récord anterior estaba en poder del Pueblo Levee Project, en la localidad de Pueblo en el estado de Colorado, de unos 16.554 metros cuadrados.

Las autoridades esperan que estos silos favorezcan el turismo en Wolmi, una popular isla vecina de Incheon.