La Casa Blanca afirmó en una presentación legal este miércoles que tiene “amplias facultades” para poder restringir el acceso de los medios de prensa al presidente, en defensa de su decisión de retirar la credencial al corresponsal de la cadena CNN, Jim Acosta.

Esta presentación se realizó ante un tribunal federal en respuesta a una demanda de CNN, respaldada por otros medios de comunicación, alegando que la decisión de prohibir la cobertura en la Casa Blanca a un periodista específico viola las protecciones constitucionales sobre la libertad de prensa.

“El Presidente y la Casa Blanca tienen el mismo criterio para regular el acceso a la Casa Blanca para los periodistas (y otros miembros del público) que el que tiene para seleccionar qué periodistas recibirán entrevistas, o qué periodistas reconoce en las conferencias de prensa”, señaló el breve descargo presentado en una audiencia judicial donde se tramita el polémico caso.

La acción presentada por los abogados del Departamento de Justicia argumenta que “el presidente podría optar por no celebrar más ruedas de prensa y cancelar todos los pases de prensa vigentes, sin implicar las protecciones del debido proceso”.

CNN demandó a Trump y a otros cinco funcionarios por suspender la acreditación de Acosta, su corresponsal jefe en la Casa Blanca, tras un altercado con el presidente durante una rueda de prensa trasmitida por televisión la semana pasada.

Acosta, quien ya tuvo varios desencuentros con Trump y su portavoz, Sarah Sanders, enfadó al mandatario con la pregunta de si durante la reciente campaña para las elecciones de mitad de mandato había demonizado a los inmigrantes que buscan llegar en caravanas a Estados Unidos.